jueves, 19 de octubre de 2017


CRÓNICA DE MIS 15 AÑOS


Eran alrededor de las 12:30 a.m., y aún yo seguía preparando mi maleta, estaba estresada porque todavía faltaban algunas cosas por empacar; pero más que estresada, estaba muy emocionada.Era mi regalo de 15 años, iba a viajar a una isla, a la cual siempre había querido ir. Me acosté a dormir, con una alegría muy grande, mi mente sólo estaba en el viaje que iba a realizar.
Amaneció, eran las 6:30 a.m., y estaba como una loca terminando de empacar lo que me faltó de la noche anterior, salí con mi mamá de la casa a coger el bus para irnos para Cartagena. Llegamos a la terminal de Cartagena, cogimos un taxi rumbo al aeropuerto. Ya era tarde, eran las 8:20 a.m., y aún no llegábamos al aeropuerto, y nuestro vuelo salía a las 9:00 a.m., me dormí en el taxi, y cuando me desperté, ya habíamos llegado a nuestro destino.
Corrimos a confirmar nuestro vuelo. Nos subimos al avión, ya estando dentro, mi corazón se sentía que iba a estallar de la felicidad tan grande que tenía. El avión empezó a despegar, y cuando ya estábamos volando, quise mirar por la ventanilla, y ese paisaje que pude observar, fue el más hermoso que vi en toda mi vida.

Por fin llegamos a San Andrés Islas. Desde el aire, hasta las personas eran súper lindos. Cogimos un taxi para llegar al hotel, era el más grande y lejos que tenía San Andrés, o bueno eso fue los que nos dijo un habitante de allá.
Llegamos al hotel, y desde que llegué me pareció muy bello, por la entrada había unos Sanandresanos con unas rastas muy lindas, que estaban tocando su música nativa (dancehall).
Entramos a recepción, confirmaron nuestro hospedaje en el hotel, y una recepcionista llamada Vivian Forbes, nos llevó a conocer todo el hotel, y a decir verdad, si era muy grande. Llegamos a nuestro cuarto dejamos las maletas en una de las camas. El hotel tenía barra libre, por lo cual mi mamá se terminó emborrachando, ya que quiso probar todos los cócteles que tenían, y mientras tanto yo estaba disfrutando en la piscina del hotel. Se hicieron las 8:00 p.m., mi mamá y yo estábamos muy cansadas, así que nos fuimos a dormir.

Era un nuevo día, domingo 8 de octubre. Nos levantamos a las 8:20 a.m., y salimos a confirmar un tour que habíamos programado para ese día. El tour salía a las 9:00 a.m., ya se nos había hecho muy tarde, por lo cual ni siquiera nos dio tiempo de desayunar, cogimos un taxi rumbo al muelle, allí nos estaba esperando una lancha para llevarnos a conocer los cayos de San Andrés, junto a otras personas.
Ya estábamos dentro de la lancha. Primero nos llevaron a conocer un manglar donde estaban la mayoría de reservas naturales que hay allá. Seguidamente, nos dirigimos a una playa, en la cual duramos hasta las 11:40 a.m. En ese transcurso de tiempo, hicimos distintas actividades, como por ejemplo, bailar dancehall, nadar, y deleitarnos con los distintos platos típicos de ese lugar. De allí, nos dirigimos a otra isla, donde almorzamos y también conocimos algunas lanchas rastafari. Luego atravesamos el mar caminando, ya que no era muy profundo, para poder llegar al acuario. Llegamos allí y nos alojamos en una choza, mi mamá se quedó ahí sentada refrescándose, mientras tanto yo estaba haciendo caretaje. De verdad fue algo muy lindo, por primera vez puede ver a un tiburón nodriza y a un tiburón martillo, había muchas variedades de peces. A las 5:00 p.m., nos dirigimos a la isla, donde nos había dejado la lancha para almorzar, para esperar nuevamente a la lancha que nos llevaría hasta el muelle. Terminó la espera, la lancha llegó. Llegamos al muelle, y nuevamente cogimos un taxi para llegar al hotel, nos fuimos para el hotel, con una pareja que también se dirigían hacia allá. Llegamos al hotel, comimos, luego nos recostamos un rato, y a las 8:30 p.m., nos levantamos, nos alistamos, y nos fuimos para una discoteca, regresamos al hotel a las 5:30 a.m.
                                                         

Ya era lunes 9 de octubre, estábamos muy trasnochadas, por cual no nos queríamos levantar, pero recordamos que ya era nuestro último día en esa estupenda isla, así que, nos levantamos, nos bañamos, y fuimos a desayunar. Luego, nos fuimos para la piscina natural del hotel. Allí logré lo que siempre había intentado cada vez que iba a la playa, pero nunca había logrado por miedo, y era saltar de un precipicio muy alto hacía el mar. Al principio tenía mucho miedo al igual que siempre, y aún más cuando el salvavidas me dijo que la piscina natural tenía 6 metros de profundidad. Luego de una hora de tanto pensar si lo haría o no y de que mi mamá me dijera que dejara el miedo, que nada me iba a pasar, sin pensarlo de paré en la punta del trampolín y me lancé hacia la piscina.
Se hicieron las 2:00 de la tarde, así que nos dirigimos a nuestro cuarto para recoger todo, ya que nuestro vuelo salía a las 4:00 p.m. Recogimos todo, salimos a recepción con nuestras maletas, entregamos las llaves del cuarto, esperamos un taxi para irnos al aeropuerto. Llegamos media hora antes de que nuestro vuelo saliera.  Ya cuando estaba en el avión de regreso a casa, me puse a pensar en lo espectacular que fue todo, en cuánto me divertí en esos 4 días, y lo agradecida que estaba con mis padres por regalarme ese viaje.

viernes, 8 de septiembre de 2017



LA OBESIDAD EN LOS ADOLESCENTES.

 Resultado de imagen para la obesidad en los adolescentes

“El aumento de la obesidad infantil ha puesto la salud de toda una generación en riesgo”                         
                                                                             Tom Vilsack



Tratando de realizar un reportaje para mi escuela, decidí indagar sobre la obesidad en los adolescente, puesto que me llamó mucho la atención; pero, esto me llevó más allá, ya que ahora puedo dar a conocer un tema que es desconocido, y a la vez, melancólico.

La obesidad es una enfermedad crónica tratable, que aparece cuando existe un exceso de grasa en el cuerpo.

Hace un año, en la Clínica De La Policía de Barranquilla, fue internada una paciente con obesidad mórbida. Sus padres se encontraban devastados al no saber qué pasaría con su hija. Le realizaron cierta operación y gracias a Dios todo salió bien.
El pasado 28 de agosto pudimos hablar con Rosalba Narváez, quien es la protagonista de este agobiante suceso.
“Yo soy la gorda, la bulímica, desde casi 13 años me dicen así. Soy esa chica a la que molestan, a la que le ponen apodos.
Yo no nací gorda, así me hice con el tiempo, a consecuencia de comer mucho dulce, chocolate, helados, comida chatarra, Desde muy pequeña no me gustaba más que ese tipo de cosas”- nos dijo Rosalba.

Los expertos en este tema afirman que hay muchas causas implicadas en la aparición del problema. Además de una mala alimentación o la falta de ejercicio físico, también hay factores genéticos y organismos que inducen a la aparición de esta.


¿Son los padres responsables de que sus hijos tenga esta enfermedad?
Muchos médicos opinan que sí.
“Los padres tienen que asumir parte de la responsabilidad y la culpa. Como padres que somos tenemos que dar ejemplo y promover dentro de nuestras familias una alimentación y hábitos saludables.- afirmó el nutricionista Rodolfo Toloza.

“Mis padres eran ignorantes a lo que estaba propensa si seguía comiendo de tal manera, no supieron reeducar mi paladar. Empecé a engordar de manera muy notable desde los 7 años”.- siguió relatando Rosalba.

La obesidad y la sociedad.         
En la sociedad actual se sobrevalora la apariencia y la belleza física. El ser obeso es visto como aquello a lo cual se tiene miedo de llegar a ser. Las personas obesas sufren constantemente de discriminación por parte de una sociedad que tiene un prototipo tanto de hombre como de mujer; debido a esta situación, las personas con esta enfermedad los  humillan y rechazan.

“A partir de los 7 años comenzaron a colocarme muchos sobrenombres. A pesar de todo, tuve una infancia muy grata, ya que era una niña y todo lo tomaba como un juego; pero en la medida que fui creciendo y madurando, me di cuenta que mi cuerpo no era agradable a los ojos de los demás. Desde los 14 años fui sometida a rigurosas dietas, pero eso no me funcionó, ya que a escondida seguía comiendo esas cosas que me hacían daño. No lograba obtener esa fuerza de voluntad que necesitaba para adelgazar. 
A medida que iba pasando el tiempo, el problema ya no solo era mi apariencia física, sino también mi salud. Se presentaron muchos días en los cuales no podía correr, ni siquiera caminar cierta distancia porque me ahogaba, e incluso estando sin hacer nada se me cortaba la respiración. En esos días sentía que me iba a morir, la mayor parte de mi vida la pasaba en una clínica, ya no tenía amigos, ni vida social, entré en una etapa de depresión. – comentó Rosalba.

Muchos médicos comparten la idea de que con dietas, ejercicios, dejando de tener una vida sedentaria, ayuda a bajar de peso, ¿pero, estas recomendaciones también aplican para esas personas que están en un grado de obesidad más avanzada?

“Me sometí a cirugías, para poder sacar grasa de mi cuerpo, las cuales me dejaban por muchos días cansada y adolorida, sin ánimo de nada. Mis padres y yo tuvimos que acceder a realizarme estas riesgosas cirugías, puesto que ni las dietas, ni realizar ejercicios me ayudaban a conseguir el peso que mi doctor me mandaba. Sentía que solo era una carga para mis padres, ya que llegué al extremo de no poder valerme por mi misma, necesitaba que ellos me estuviesen haciendo la mayoría de las cosas. Gracias a Dios, hoy he logrado bajar 20 kilos, no he bajado mucho para lo que necesito, pero por lo menos ahora puedo realizar las cosas yo sola"- expresa alegremente Rosalba.


Cuando se tiene este tipo de enfermedades se está propenso a, no solo sufrir daños físicos, sino también mentales, los cuales se ven reflejados en la autoestima. Es por esto que siempre se tiene que pedir ayuda a tiempo, detectar y aceptar que se tiene esta enfermedad, para poder curarla.

domingo, 26 de marzo de 2017




MEDIOS DE COMUNICACIÓN MASIVA

Son aquellos medios tecnológicos que sirven para enviar mensajes que van dirigidos a una gran cantidad de público, y que  pueden atravesar grandes distancias en un mínimo de tiempo.
                       
                                                              CARACTERISTICAS

  • Son diferidos (transcurre un tiempo desde su producción hasta su emisión al público).
  • Son directos (llega instantánea al receptor en el momento de su emisión).
  •  Ofrece un lenguaje sencillo que permite al receptor un menor de esfuerzo para comprender.
  • Ser medios electrónicos (necesitan de electricidad para funcionar).
   
                     CONTENIDO DE LOS  MEDIOS DE COMUNICACIÓN  MASIVA

A. Informativos: comprenden las noticias de carácter política, económica, deporte, vida social. 
B. Entretenimiento: pretende el descanso y la diversión de las personas. Ejemplo: novelas, caricaturas, musicales, juegos, etc. 
C. Educativos: apoya el proceso de enseñanza aprendizaje
D. Publicitarios: promueven la imagen de una empresa y sus productos y servicios.
E.  Propaganda: difunde ideas religiosas, políticas, etc.

INFLUENCIA EN LA SOCIEDAD
Los medios de comunicación masiva tienen gran influencia e impacto sobre la sociedad  moderna, porque a través de estos no solo se informan, sino que también se divierten y se educan, como por ejemplo los programas infantiles  que les deja alguna enseñanza a los niños.   
Los medios de comunicación masiva además de tener una gran influencia en la sociedad también están orientados al desarrollo económico y cultural, porque a través de aparatos, casi siempre electrónicos, informan o promueven temas de interés económico, como por ejemplo, lo que pasa con el dinero o bienes que entran al país; también son de interés cultural ya que nos informamos sobre las zonas verdes, las diferentes culturas y sobre cada rincón del país. 
Estos medios no solo tienen aspectos positivos, sino también  negativos. Un ejemplo de esto son los programas o series obscenos que presentan en la televisión o en algunos casos programas infantiles que tienen un contenido un poco exagerado para los niños de poca edad, quienes al no tener su personalidad definida quieren imitar, arriesgándose a hacerse un daño.